Los principales factores son la escasez de material, debido a las bajas tasas de recogida, y la falta de contenedores.
En Europa, las fábricas entraron en pánico y estaban dispuestas a pagar casi cualquier precio para asegurarse el volumen necesario. No obstante, se espera que los precios bajen dentro de dos o tres meses con la misma rapidez con que subieron. Pero es poco probable que suceda en abril y los fletes parecen estabilizarse.
En los Estados Unidos los precios del OCC y otras calidades de papel recuperado también han subido desde principios de año. Aunque la escalada se mantuvo prácticamente estable durante el mes de marzo, muchos proveedores prevén que los precios podrían dispararse en verano.
Sin embargo, los traders creen que los precios se han contenido por dos razones:
- las dificultades para trasladar el material a la costa, debido a una oferta insuficiente de contenedores marítimos y otros retrasos en los puertos, y
- una cantidad importante de tiempo de inactividad por mantenimiento en las fábricas de cartón para envases, a pesar de que las fábricas tienen una buena cartera de pedidos.
Muchos creen que el cese de las paradas por mantenimiento, unido a la fuerte demanda de exportaciones, aumentará la demanda global de fibra en los próximos meses. Además esa demanda se verá incrementada por la fuerte recuperación económica posterior a la pandemia, potenciada por el paquete de ayuda de Covid, de 1,9 billones de dólares, del gobierno federal.
“No hay envases, ni OCC en proceso, para abastecer a una economía en expansión debido a la reactivación de la actividad, del consumo y las vacaciones”, dice un trader de la zona de Nueva York, cuya opinión comparten otros trader de papel recuperado de Estados Unidos. La situación podría ponerse al rojo vivo en los próximos cuatro o cinco meses».
Mientras que Wall Street ha reaccionado favorablemente al paquete de la ayuda federal de Covid, algunos economistas advierten que otros 2 billones de dólares, además del estímulo económico del año pasado, aumentarán la deuda del gobierno federal a casi 30 billones de dólares, creando una carga económica insostenible que devaluará el dólar estadounidense y podría causar una alta inflación. Otros argumentan que los bajos tipos de interés, que alcanzan niveles récord, permitirán afrontar fácilmente este gasto.
Mientras tanto, las fábricas nacionales se han beneficiado de los problemas de transporte que han reducido los envíos marítimos (muchos traders están experimentando grandes dificultades para cargar el material en contenedores marítimos y subirlo a un barco) manteniendo más volumen de material en Estados Unidos. Sin embargo, según los traders, la escasez de conductores de camiones y los problemas en el transporte ferroviario también están dificultando la logística de las fábricas estadounidenses. Recycling International. 23.03.2021
