El pasado mes de agosto, el gobierno malasio anunció que el 1 de noviembre entraría en vigor una nueva normativa que exigiría unos criterios de calidad más estrictos para la chatarra. Sin embargo, en el nuevo comunicado, informa que ha retrasado la aplicación de los nuevos criterios hasta el próximo 31 de diciembre. Mientras tanto, continuarán aplicando las medidas anteriores.
Con esta prórroga, el gobierno de Malasia pretende dar más tiempo a la industria para que se adapte a las nuevas medidas. En el siguiente enlace puedes acceder al comunicado.