El sector del reciclaje insta a los Estados miembros a tomar medidas que aumentan las presiones económicas en virtud de las propuestas de envío de residuos

Lamentablemente, los legisladores de la UE continúan impulsando legislación que incentivará la extracción de materias primas primarias al agregar más cargas regulatorias a los recicladores.

“Ya hay una sobreoferta de más de 20 millones de toneladas de metales reciclados y siete millones de toneladas de papel recuperado en la UE. Si se corta el acceso a los mercados internacionales, la demanda colapsará y la viabilidad económica de reciclar estos materiales disminuirá drásticamente. En cambio, los materiales reciclables se verterían en vertederos, y los volúmenes de recolección y reciclaje también disminuirían significativamente. Al final, los contribuyentes y los municipios tendrían que pagar la factura”, afirma Olivier François, presidente de la Confederación Europea de Industrias del Reciclaje (EuRIC).

“Esto entra en conflicto fundamentalmente con la propia economía circular de la UE y las ambiciones del Green Deal. Los Estados miembros ahora deben actuar poniendo fin a las medidas más erróneas de la propuesta o arriesgarse a perder puestos de trabajo en Europa y las instalaciones de reciclaje, especialmente las PYME, cierran sus puertas de forma permanente”, añadió Olivier François. Además, los recicladores europeos piden un registro de auditoría que se base en prácticas comerciales bien establecidas que garanticen la transparencia del mercado y el acceso a las auditorías para las PYME.

El mercado único de la UE para materiales reciclados todavía se ve obstaculizado por procedimientos de «notificación» desproporcionados. Europa cuenta con algunas de las instalaciones de reciclaje más innovadoras y avanzadas del mundo, aunque las instalaciones altamente especializadas para determinados materiales, en particular los plásticos, no están disponibles en los 27 Estados miembros.

Lamentablemente, el comercio interior de la UE se ve frenado por normas inciertas que permiten a los Estados miembros rechazar envíos de materiales destinados al reciclaje, a menudo por motivos injustificados. Los Estados miembros de la UE ahora deben garantizar que los recicladores cuenten con seguridad jurídica y administrativa que facilitará los envíos de materiales para reciclar e impulsará verdaderamente una economía circular europea de cosecha propia. Por ejemplo, la inclusión de las entradas EU3011 y EU48 para residuos plásticos no peligrosos será fundamental para garantizar un reciclaje de plástico adecuado. EuRIC 7 03 23