nº 211 - Noviembre 2022

El Pleno de las Cortes Valencianas ha aprobado este jueves la Ley de Economía Circular de la Comunitat Valenciana, «una legislación con la cual nuestro territorio vuelve a liderar y dar ejemplo de cómo se gestionan los recursos de forma responsable y sostenible, y cómo con su aprovechamiento podemos generar energía limpia», ha celebrado la consellera de Transición Ecológica, Isaura Navarro.

La consellera ha defendido que se trata de una ley que “nos permite adaptarnos a las realidades del cambio climático en nuestro día a día y en los usos que hacemos de todos los residuos que generamos”. Se trata, según ha explicado, de que “vivimos en un mundo donde los recursos son finitos, y por tanto no nos queda otra que avanzar en materia de reducción, reciclaje, reutilización, reparación y recuperación”.

“Esta ley nos permite seguir propulsando la agenda verde, que es uno de los pilares básicos que tenemos el Botánico y que también nos marcan las directrices europeas”, remarca la titular en el frente de la Conselleria de Transición Ecológica. De hecho, Navarro también ha insistido en que hablar de iniciativas ecologistas «no es otra cosa que cuidar la salud del planeta”.

De este modo, la norma valenciana establece medidas orientadas a la mejora continua de la gestión de residuos, a análisis periódicos de los sistemas de recogida, a tareas de educación ambiental, a implementar el ecodiseño, al fomento de la separación en origen, sistemas de recompensa o nuevas miniplantas de biorresiduos, entre otros.

Para la consellera, esta ley fija la hoja de ruta del Consell en materia de residuos y sienta las bases de un modelo que abandona la economía del ‘usar y tirar’ por la economía circular, donde se le consigue una segunda vida a los recursos. Precisamente, ha reafirmado Navarro que con esta normativa “se pretende que los residuos sean la minería del futuro de Europa, podamos reducir la extracción de materias primas y apostemos por el reciclaje y la reutilización como líneas básicas de la economía”.

Además, según ha reivindicado la consellera, «hace falta el compromiso conjunto de la sociedad, de la industria y a nivel individual para su aplicación porque el Mediterráneo somos epicentro vulnerable del cambio climático y nuestro territorio tiene que estar preparado por no lamentar episodios de emergencia climática que no serían nada amables”. Generalitat Valenciana. 10.11.2022